Alessandra
Guerriero
05/02/92
Práctica
de recuperación
Situación penitenciaria en la cárcel La Modelo
Largas colas rodean las calles junto a la cárcel La
Modelo ubicada en la ciudad colombiana de Barranquilla, los familiares esperan
durante varias horas poder visitar a sus presos, todos con la esperanza que
éstos sigan allí y no que los hayan reubicado de cárcel
Desde las 4:30
de la mañana se ve gente en cola a la espera de que abran las puertas de la
cárcel a las siete de la mañana. Hay gente que se ubica en los primeros puestos
desde incluso el día anterior con las ansias de ver a sus seres queridos, mientras
hay otras que simplemente se colocan ahí para vender sus puestos a los que
estén dispuestos a pagarla el privilegio de entrar de primeros a la cárcel.
Al abrirse las
puertas de la cárcel los guardias sacan listas con aproximadamente 20 paginas
llenas de nombres de todos los presos, esto sirve para que los visitantes
puedan revisar si la persona que esperan ver ha sido transferida a otra cárcel,
que por lo general los mandan fuera de Bogotá como lo indicó una de las mujeres
de la cola.
Una modalidad que
ha empezado a implementar esta cárcel son las reservaciones telefónicas mediante
un sistema automatizado que anota a los visitantes según orden de llegada, o en
este caso de llamada para que no tengan que hacer aquellas largas colas. El
ente encargado de esto es la Inpec (Instituto Nacional Penitenciario y
Carcelario), según sus datos reparten solo 1500 turnos de visitas dominicales
para los 2500 presos que habitan en esa cárcel.
Los días de
visita afuera de La Modelo hay gran revuelo de gente, tanto de los que esperan
por su turno para entrar, como de los vendedores ambulantes que tienen
mercancía variada para las necesidades de los reos, que preferiblemente es
frita o asada y sin salsa, según indican fuentes de la cárcel. Al igual que
también se venden o alquilan chancletas para poder ingresas al recinto, ya que
no es permito el uso de zapatos convencionales puesto que ese calzado pueden
ser un lugar para esconder objetos, así lo indica una de las mujeres que se
encuentra afuera de la cárcel, haciendo mención a que no se debe ocultar nada a
la hora de entrar, “a la vista, patrón…
todo lo debemos llevar a la vista, menos la pena”.
Las visitas en
La Modelo están abiertas hasta las cinco de la tarde, y no es sino hasta el
domingo que viene que los familiares pueden volver a hacer sus colas, siempre
respetando el turno del otro, y finalmente rencontrarse con sus seres amados.
Reos de La Modelo en el patio. Fuente: internet |
Visitantes a las afueras de la cárcel esperando ingresar. Fuente: internet |
Estado de vida de los presos de la cárcel La Modelo. Fuente: internet |
Cola de familiares esperando para la visita. Fuente: internet |